Donde no se me quiera

¿Qué lugar del mundo no visitarías nunca? ¿Por qué?

Estaba hablando con mi hermana ahora sobre que, tal día como hoy, comencé a escribir este blog. Ella, que mucho antes de ese  día me estuvo insistiendo para que escribiera, y me dedicara a poner online lo que antes escribía en forma de cartas o relatos pequeños, escritos en libretas y escondidos de la mirada ajena. Pocos saben que escribo. Unos pocos más saben que me presenté a un concurso, que no gané,  escribiendo un relato de ficción y que sorprendió incluso a los que me conocían, por esto de que yo me abro en canal frente a muy pocas personas.

Lo cierto es que soy una mujer  muy tímida a la que nunca le ha gustado estar donde no se le quiere. Me siento tremendamente incómoda si observo el menor atisbo de, mira chica, aquí sobras.

Pero escribir me gusta. No. Miento. Me encanta escribir. Sé que hay gente que lo hace muy bien. Leo otros blogs y alucino. Pero aunque lo estuviera haciendo remal, no cerraría el grifo de la creatividad. Me ha costado tanto decidirme a escribir,  que ahora los escritos que, de siempre han estado en mi cabeza, se han puesto en fila uno tras otro esperando a que yo les de vida. Y voy con demasiados años de retraso y no quiero colgar las musas detrás de ninguna puerta. Ahora que escribo pienso en historias, en rimas, comento incluso cosas en Instagram por el solo placer de escribir. Me encanta el silencio mientras escribo, roto solo por el sonido del teclado. Luego vuelvo a mi día a día. Como si no hubiera pasado nada, cuando no ha sido así. Escribir deja huellas bonitas en mi persona. En mi mente. En mi espíritu.

Hace muchos años, yo tenía 18, mi padre me dijo que, mejor, no volviera a visitarlo ni a verlo nunca más y yo acaté esa decisión, como lo haría un soldado en una guerra. Era lo que había. Y lo que había no era para mí. En este momento de mi vida solo yo decido sobre mi persona, a quién y qué quiero. Yo soy futuro.

Agradezco infinito el que mi hermana me hiciera ver que en otros sitios sí soy querida. Y yo lo soy en las letras. Gracias hermanita!!


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